Por si alguno no reconoce el invento por la imagen, deciros a todos que son dos chorros que sirven para quitarte la arena de los pies cuando vas a salir de la playa. Los más avispados me imagino que ya se habrán dado cuenta de que tiene un gran problema de planteamiento, pero por si acaso lo voy a explicar. Vale, sirve para quitarse la arena de los pies, pero está completamente rodeado de arena, por lo que habría que mantenerse en el sitio para no volverse a llenar de arena.
Está claro que es un invento bien intencionado. E incluso diría que hasta bien pensado: para que la gente no se vaya de la playa con los pies llenos de arena pones unos chorros de agua a la salida y saldrán limpios. El problema aparece cuando rodeas esos chorros de unas redes atrapa arena, pero no para guardarla, sino para tenderte una trampa malévola. Iluso de ti, avanzas por la playa para quitarte la tierra antes de irte y cuando ya te has lavado en los chorros levantas la cabeza y te sientes atrapado. Ves arena por todos los lados rodeándote y riéndose de ti. En cambio, tu con tus pies recién limpitos no quieres volvértelos a manchar, por lo que avanzas dando unos pasitos bastante ridículos hasta que llegas a la zona donde ya no hay arena.
Así es amigos, lo que podría haber sido uno de los grandes inventos del verano se ha convertido, como todos los inventos destinados para esta época del año, en un invento para simplemente dejarnos en ridículo.
Pienso tontunadas, luego soy más feliz.
Un saludo,
Servidor.